Qué es

Desde mediados de 2.015, tras una reforma legal es posible tener un divorcio ante un Notario.

Esta reforma en la Ley de Jurisdicción Voluntaria supone un cambio considerable pues el plazo para estar divorciado se reduce considerablemente de tal manera que en un par de días (unas 48 horas) una pareja puede tener el divorcio en su mano mientras que el divorcio por el Juzgado tiene una espera de entre un mes y tres meses.

Requisitos

No obstante, no todas las parejas pueden optar por un divorcio notarial ya que han de cumplirse una serie de requisitos:

1. Estar casado al menos 3 meses
2. No tener hijos menores de edad, hijos incapacitados judicialmente o bien que la esposa se encuentre embarazada.
3. Que sea un divorcio de mutuo acuerdo o amistoso. Es imposible divorciarse por un notario si no hay acuerdo, es decir, en los divorcios contenciosos.
4. Deben ser asistidos en la Notaría por un abogado quien, además de asesorarlos en todo el proceso deberá redactar el Convenio Regulador de divorcio, y deberá firmar también la escritura de divorcio.

Aparte de que se reducen los plazos, otra diferencia con el divorcio judicial es que no es necesario contar con un procurador lo que puede suponer un ahorro económico, aunque realmente no es así, pues los honorarios que en un divorcio de mutuo acuerdo judicial se lleva el procurador, en un divorcio notarial se los lleva la notaría.

Asimismo, otra ventaja de este divorcio es que no es necesario recopilar los certificados de matrimonio y en su caso de nacimiento de los hijos (ojo, siempre que sean mayores de edad, pues con hijos menores no es posible realizar este divorcio), sino que es suficiente con llevar el libro de familia.

Otro documento necesario es el volante o certificado de empadronamiento, pues no cualquier notario puede realizar cualquier divorcio, solamente podrá un notario que tenga su despacho del último domicilio conyugal o bien del domicilio de cualquiera de las partes.

Si en el matrimonio existen hijos mayores solo deben ir  a la notaria y prestar su consentimiento si hay medidas que les afecten porque no sean económicamente independientes y aún vivan con sus padres.

Es decir, entre 24 y 48 horas, si están asesorados por un buen abogado/letrado, una pareja puede estar divorciada sin tener que esperar varios meses como ocurre con los juzgados.

Una vez que se han divorciado, los notarios envían a los registros civiles una comunicación donde se les notifica que el matrimonio se ha disuelto.

Honorarios de un divorcio ante notario en Alcalá de Henares

La tasa notarial ronda entre los 150 € y los 200 € a lo que hay que sumar el coste del letrado que suele rondar entre los 150 € por cada cónyuge. En total, unos 450 € o 500 € sale divorciarse ante un Notario.

Una vez salen por la puerta de la Notaría, ya están divorciados y los efectos son exactamente los mismos que un divorcio judicial.

Inconveniente

La escritura de divorcio podemos conseguirla en apenas unos días, pero el proceso aún no está acabado pues el Notario debe enviar la escritura autorizada al registro Civil correspondiente, y no lo hace telemáticamente sino al estilo «tradicional». Un vez que llega al organismo, el funcionario tendrá que anotar el divorcio en el margen izquierdo del certificado de matrimonio para que éste tenga efectos frente a terceros y, una vez practicado el apunte, debe devolver la escritura de nuevo al notario.

Esta fase puede durar un tiempo.

Ventaja

Mientras que los juzgados tienen el mes de agosto como inhábil, no pasa lo mismo con las notarías, las cuales, muchas de ellas, abren en dicho mes, por lo que una de las ventajas de un divorcio notarial es poder divorciarse en el mes en el que todos los juzgados civiles de España se encuentran cerrados.